"Siempre he creido que la elegancia era el arte de decir basta. Y, al revés, que no hay nada más vulgar que pecar de exceso. Te lo dice un excesivo por vocación. Te lo cuenta este aprendiz de despedidas. Hay que irse más. Porque sólo te puedes ir cuando lo haces por elección. Y porque si es obligación, ya no te estás yendo, te están echando.
Hay que saber leer cuándo uno sobra, cuándo ya ha hecho su trabajo, cuándo se puede ir con la conciencia tranquila y cuándo con la esperanza bien.
E igual me equivoco mucho, pero creo que sólo hay una cosa más impotante que el saber estar, que es el saber no estar. Quererse bien".
RISTO MEJIDE (EL SENTIMIENTO NEGATIVO)
Aprendo a saber no estar
para concluir todos mis arrevatos conscientes,
para lograr deambular sosegadamente,
para no doblegar más al libre albedrío
y dejarle hacer su función en paz:
MATAR AL DESTINO.
Aprendo a marcharme
como aprendí a quedarme;
sin más vueltas a la tuerca:
Me voy como vine,
en silencio
y
sin avisar...
Quiéreme como yo te quiero a ti,
para que no empiece nada y nada tenga que acabar...
14 comentarios:
Y tú creiste que no sabía que te irías.
suena a despedida...
Besos
Noooo!!!
Me suena a un "adiós" o incluso si me apuras, a resignación, pero por su puesto, espero que no sea así. Me gusta aprender a saber no estar, pero no me hacen gracia los adioses ni las resignaciones que implican conformismo. He aprendido de experiencias de otros, que los sueños conseguidos con lucha e insistencia saben mejor a pesar del dolor del camino.
Un abrazo wapa.
Saber detenerse, saber no estar, saber cuándo marcharse es quedarse, es también saber amar como se debe, saber respetar, saber vivir.
Estar y no estar, parte de lo mismo; ser y no ser.
Magnífico.
Besotes.
puedes querer no estar, pero aqui, en esto que late en mi pecho estas...lo sepas o no...
ORI: ... más besos pa ti; niña alada, de colores, vital, silenciosa, osmótica, amiga...
ILSA: siiiiiiiiii
SILVIA: Saber no estar es una forma más de amar, un estadío más simplemente... otro abracico para ti preciosidad.
FERNANDO: ¡y punto! ¡qué más quiero Baldomero! la otra parte del círculo... Gracias por la empatía, de nuevo... Magnífico tú.
ANTONIO: Uffffffff ¡gracias! lo sé, pero viene bien que me lo recuerdes (espero que todo bien al otro lado del charco) Un beso enormeeeeeeeeeeeeeee
Me encanta el dibujo,aunque siga buscando ese enredo de piernas,jejeje.
¿Estar, no estar? ¿Qué es eso, sino ser?
Besicos muchos guapa.
CASITA: El enredo lo pones tú, yo lo entiendo perfectamente jajajajaja... gracias por el piropeo... estar no estar...esa es la cuestión... Solo forma parte de expresar, nada más.
Más besos pa ti ¡presiosa!
Bufff.... Madre mía... Esto es un blog hecho con mucho mucho sentimiento..y con el toque María ( la los carbonara en sartén grande y con mucha nata)
Buff lo he flipado con tus dibujos y caracterizaciones.. me encantan todos.
(viendo blogs así me da mucho corte el mío que solo lo uso para churretear y muy de vez en cuando)
Tres besos.
Vale, siempre es posible no estar... Hay ausencias que son presencias, creo haberlo dicho antes... Pero para ello hay que saber ser paradoja y no contradicción
RUYELCID: Pequeño amigo... ¡gracias! por lo del sentimiento (porque es verdad ;-)) y por que te hayan gustado las ilustraciones (sube la moral) Ya sabes que mi toque sigue esperándote, además ahora tengo nuevos y suculentos menús jejejeje
Tu blog a mi me ha apasionado, así que... ¡me lo quedo! otros tres besos para ti.
MARIO: ummm ¿y cómo se es paradoja? espero una explicación ... ya vuelvo a tener ordenador, espero coincidir con usted...jejeje besitos guapo!!!!
Como la explicación es larga, ya te platicaré yo cuando nos encontremos... De eso y de futuros viajes, por supuesto
MARIO: ¡vale!
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