Puedo escuchar la lluvia cuando llueve,
sentir el calor estos días estivales,
puedo disfrutar de las sábanas limpias
y sentirlas caer sobre mi cuerpo,
como una pluma haciéndome
cosquillas en las rodillas.
Escucho a la mañana con un café en la mano,
respiro los murmullos de la calle cuando atardece
y como queso con picos con una cerveza fresca.
Ahora,
puedo ver los colores de los óleos que uso,
hablar con mi madre por teléfono
y mirar a los ojos a los demás humanos
(también miro a los ojos a los perros).
Me escurro en el sofá entre dos cojines enormes,
leo un libro que pesa un kilo y doscientos gramos,
llamo a Jose Mari una vez al día
y escucho “Agua” sin llorar.
Hoy bailo delante de Pibe,
una danza inventada…
descalza;
ahora puedo disfrutar sus carcajadas
y acabar llorando de risa.
Ahora soy y elijo poder vivir todo esto.
Ayer…no existe,
Mañana… tampoco.
http://www.youtube.com/watch?v=SQOuylJ3diU&feature=artistob&playnext=1&list=TLEXRopLE9xJg