NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL

NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL
BLOG DE MARIA

OTRO MUNDO ES POSIBLE

OTRO MUNDO ES POSIBLE
CUANDO LO SOÑAMOS JUNTOS...

lunes, 29 de noviembre de 2010

EL PASEO DEL CAMALEÓN


Sonaba despacio,

a canción de artista inglés;

le acompañaba una mujer con los labios rojos

y el pelo alborotado.

Ya no tenía tatuajes

(se los borré soplando).




Nunca me divorcié tan rápido de la nostalgia,

ni hui tan magistralmente,

nunca …

¡jamás!

Nunca pensé en perdonarme la locura…

y me fui al mar.


Hay distancias tan fervientes que se hacen religión.


Recogí los tatuajes en un cuenco

y me pinté la cara con ellos,

me calcé las botas que uso para la guerra

y firmé la paz.


No miraba a la mujer de rojo,

escalaba las cabezas y llegaba a mí,

para sonar a fado efímero…

como cuando lo imaginé buceando,

dentro.

Y seguía transmutándose entre las mesas del bar,

como un camaleón mimetizado con el desierto…

del color de las paredes.


Sacié la ira malgastándome,

caminando por la orilla de un mar que no tenía nombre

y estando más sin nadie que nunca…

Comí en las manos de un extraño

y le vi a él, con su mujer de labios rojos…mirándome.


A medida que su boca perfecta se acercaba

más me refugiaba,

y, ahora, sonaba a pop español y olía a rebeca mojada.

Se hacía tan enorme que creí reconocerlo,

pero él no lo hizo conmigo,

no era a mi a quien buscaba,

tenía a alguien detrás.


Y estando en la arena,

revolcada,

sentí que nadie me había comido así

(como me imaginaba que comía él

los labios rojos de la mujer de al lado)

y decidí volver…

regresar del lugar de nadie

y pedirle un baile,

al fin y al cabo a mi los camaleones me gustan

y sus ojos nublados,

creo…

merecerían la pena.




domingo, 21 de noviembre de 2010

DETRÁS DE DELANTE


La veda se abre,

es tiempo de cazar…

“mujeres que corren como lobas”.


Las palabras en la nuca,

impregnando la espalda.



Lunas en blanco y negro centellean,

más atrás del detrás;

son vasos vacíos, manos vacías, bocas vacías…

gente vacía.


Escaláis la tinta para aparecer aquí,

entre la vigilia y el sueño: EN EL DIBUJO;

despampanantes, enérgicos…

como sois juntos:

Invencibles.


Admitámoslo,

susurrando a las afueras,

sois… invencibles.






lunes, 15 de noviembre de 2010

SLOWLY


Nos pusimos la ropa y la acompañé hasta
el coche. Seguíamos desnudos a pesar de todo. Quizá por eso se asustó.
Quizá al llegar a su casa intentó vestirse y no pudo. No lo sé, sólo
estoy especulando. Especulo porque a mi me pasó.

(RoveRivera)




Cuando caminas sola, sólo el silencio te acompaña; como fiel escudero o como escudo sibilino. Cuando caminas sola, en silencio y con la desnudez tatuada; sólo el reflejo en los espejos te hace inmune o receptiva al sopor, al amor o a la tendencia absoluta de vivir… sin más.

Un día leí un texto y me di cuenta de que era una mujer, si, una mujer ingente, colosal o colmada de magnificencia… y sonreí como jamás lo había hecho. Carcajeaba desaforadamente, como si estuviese loca. Cantaba con la voz que me había prestado la paciencia y acompañaba la melodía con los nudillos encima de una mesa de madera… parecía de verdad, fue real.

Pero seguía caminando desnuda y sola, con el silencio perdido entre la música… disimulándolo, parecía de verdad… también fue real.

Otro día, me encontré con un gato de pelo negro. Intenté acariciarlo y contarle que cantaba porque me había descubierto por fin. El gato me miraba, se llamaba Micho y no dejaba de gesticular, como yo ¡qué bueno es el gesto! Pero se aburrió y se fue. Maullaba mientras su eco retumbaba en mi frente, porque se iba. Pero no lloré, sabía que su miar sería pasaje presente en mi futuro, haría algo mágico en mí y me reconvertiría en lo que soy.

Mi desnudez dolía tan poco ya, que me hacía arrancar miradas, sin escrúpulos; a todos los vestidos, a todas las vestidas, a todas las personas bellas y a las bestias también. Hubo algo más de realidad.

Otro día más, cualquiera, siendo mujer y estando desnuda…, más desnuda que nunca y más hercúlea si cabe; alguien agarró mi cuello por detrás, entremetió sus dedos por entre mi cabello erizado y me besó. Fue un beso corto, tal vez con: principio-nudo-desenlace… fácilmente recordable por ser perfecto en ejecución y en tiempo, extenuado de tan enorme y condimentado con el calor del sol escondido… Un beso estrecho y deseado, carnal y transparente. Y consiguió hacerme enmudecer en mi propio silencio. Evocando mi feminidad, latente, presente… y creyendo más en mi que en ningún ser humano. Cuando quise darme cuenta, el dueño de la boca no estaba, pero había dejado su aroma impregnando el aire removido por sus alas… y se fue. Pero tampoco se me ocurrió lagrimear, sólo seguir cantando, lo más despacio que sabía hacer… para que no acabara nunca.

Y de mi desnudez más absoluta solicité una beca como institutriz, para dejar de enseñar lo enseñado y sucumbir a los pasos bien dados: firmes. Seguir bañándome en los mares más preciados y rozar los atisbos que quedaran en “los laberintos de las calles de aire”, sin miedo a no saber vestirme…, a bajarme de los coches en marcha; despacio, todo muy despacio… para que tampoco terminara jamás… y especulando, siempre especulando…, porque, sin más remedio y del modo más real posible…a mí, también me estaba pasando.



P.d: la inspiración está hecha de una amalgama de ojos, miles de iris moviéndose y, a veces, cuando menos lo esperas... cuatro coinciden y sólo se puede hacer una cosa: dejarse llevar...



martes, 9 de noviembre de 2010

EL BESO


El beso.


El beso es transparente.


Cuando me besabas eras transparente.


Cuando no lo haces, también.


El beso.


Tu cabeza es una línea ondulada

que macera tu cuello,

inclinándose hacia mi boca.


El beso.


No me tambaleo ya cuando no me besas

porque mi boca es una línea en el horizonte,

infinita.


El beso.


Soy de carne y hueso hasta en los dibujos;

nuestras bocas: líneas de fuga hechas de grafito,

nosotros: un beso.


El beso… transparente y banal,

vacío en los astros

y culminado ya,

si,

culminado.


El beso…

transparente,

tú y yo…

líneas de fuga,

...fugaces…



martes, 2 de noviembre de 2010

EL MAR, EL MAR, EL MAR

¿Qué tienes en la cara?

No te preocupes, sólo es ... el mar.